Inicio >
Historias > La Danza
La Danza
Por: José Luis Palma Gámiz

A la luz de los candiles
entre sombras afiladas,
el silencio se despierta
con tres golpes de guitarra.
Y una soleá en el viento,
y un solo cuerpo que baila,
y un sueño que se desvela
para hacer la noche larga,
mientras las gitanas viejas
con agujas cinceladas
bordan con seda las batas,
para que sus mil volantes
desplieguen fuertes las alas.
Lloran los bordones roncos
la prima gime enlutada,
las palmas se han hecho íntimas
y los suspiros espadas,
cuando sus brazos se encienden
en dos antorchas quebradas
como alondras abatidas
presas de plomo de caza.
Sus muslos; montes de cobre,
marcan el vuelo a su falda.
Los valles de sus caderas,
como cajas de guitarra,
hacen remover al viento
las candelas de su enagua,
mientras que su pecho sierra
de aguardiente y mermelada
rezuma aceite y limón
por la boca y la garganta.
Sus dos pies; cristal de roca,
van repicando en campanas
que me suenan a mezquitas
y a fuentes de las alhambras.
Y en sus manos los palillos,
y en el ambiente la magia,
componen la sinfonía
de la danza milenaria
que baila la Andalucía
de Antonio y Carmen Amaya.
No sigas Blanca del Rey.
No me apuntes con la daga
que se escapa de tus ojos
y se clava en mis entrañas,
que cuando rompes tu cuerpo
con la copla y la guitarra
se te muda hasta el color
de la luz de tu mirada.
Y en mi corazón la angustia,
y en mi boca la palabra
me sabe a azahar de Córdoba
que es tu tierra y es mi patria.
2004-04-07 01:00 | 0 Comentarios
Referencias (TrackBacks)
URL de trackback de esta historia http://gargantua1.blogalia.com//trackbacks/17375
Comentarios
portada | subir